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El camarista Alejandro Slokar opinó hoy que “la memoria colectiva tiene que conservarse y transmitirse” en el país “para que se sepa qué fue el terror” provocado por la última dictadura cívico militar, y aseguró que “negar o banalizar” genocidios, “no puede ser inocuo”. 

Martes, 5 de septiembre de 2023

“Negar o banalizar genocidios no puede ser inocuo. Tiene que arrastrar consecuencias porque está afectando la dignidad humana de las víctimas”, explicó el integrante de la Cámara Federal de Casación Penal en declaraciones formuladas esta mañana a Radio Nacional.

El juez de la Cámara de Casación Penal hizo referencia así al acto encabezado este lunes en la Legislatura porteña por la diputada nacional y candidata a vicepresidenta de La Libertad Avanza, Victoria Villarruel, que combinó un homenaje a víctimas de Montoneros y ERP con un espíritu negacionista de los crímenes de la última dictadura.

El acto provocó una movilización de organizaciones de derechos humanos y partidos políticos en repudio a este tipo de expresiones.

Slokar, en tanto, criticó a quienes “intentan negar, relativizar o manipular las graves violaciones” a los derechos humanos “que han sido verificadas judicialmente y con todas las garantías. Es grave -sostuvo- y es un gran retroceso porque advierte que se puede proyectar en un riesgo de naturalizar la impunidad, el horror y la barbarie genocida”.

Por ese motivo, destacó la necesidad de “transmitir la memoria colectiva a todas las generaciones para que sepan qué y cuáles son los delitos de lesa humanidad y el terror padecido por la Argentina” durante la última dictadura.

Al respecto, Slokar afirmó que “igualar a los genocidas con los delitos comunes, aunque aberrantes, cometidos muchos de ellos por parte de la guerrilla es inadecuado porque los crímenes contar la humanidad los comete el Estado y, por eso, son imprescriptibles”.

En ese sentido, subrayó que “no hay democracia sin justicia por los crímenes de Estado”.

Por otro lado, Slokar se mostró a favor de una legislación que castigue el negacionismo como ocurre, citó, en países europeos como Alemania, Bélgica y Francia, porque “la magnitud de la degradación a la que fueron llevadas las víctimas por un genocidio no se puede banalizar”.

“Provoca una afectación a la dignidad de las víctimas que, en verdad, obtura el recuerdo y el proceso de elaboración traumático del duelo real de los sobrevivientes. Eso es lo que hay que impedir”, consideró.

Además, recordó que, desde 1983 a la fecha, la Argentina es “reconocida en todo el mundo por su política de memoria, verdad y justicia” y señaló que con el cumplimiento de esto están comprometidos “los tres poderes del Estado”.

“Nunca hubo -valoró el magistrado- una instancia universal en donde sin fuerzas de ocupación, por medio de los jueces de la constitución social y a través del empleo de las leyes ordinarias se llevara adelante la revisión del pasado como se hizo en la Argentina con el Juicio a las Juntas. Eso es una marca de nuestro ADN democrático”, mencionó.

“Por eso -resaltó Slokar- la advertencia y las luces de alarma frente a las condiciones que nos quieren llevar situaciones pre-democráticas. Hay que alertar frente a discursos que procuran la impunidad o encubrimiento de aquellos que secuestraron, torturaron, desaparecieron a padres, se apropiaron de sus hijos y expoliaron patrimonios. Dijimos ‘nunca más’ y eso se reafirma constantemente”, postuló el juez.


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