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Tras responder las críticas del exgobernador Jorge Capitanich quién denunció que el gobierno de Leandro Zdero impulsa la persecución judicial de opositores, el ministro de Gobierno y Justicia del Chaco, Jorge Gómez, se fotografió con el exministro de Justicia del macrismo, Germán Garavano, quién fue investigado por formar parte de una mesa judicial que promovía causas penales contra políticos, sindicalistas y dirigentes sociales opositores.

Sábado, 26 de octubre de 2024

“Decir eso es una falta de respeto, no solamente a nosotros, principalmente a las instituciones. Nadie puede decir que en el Chaco pueda haber en este momento una presión a la Justicia”, aseguró ayer el ministro de Gobierno, Justicia, Trabajo y Derechos Humanos del Chaco, Jorge Gómez. Fue en respuesta al exgobernador Jorge Capitanich quién denunció que el gobierno de Leandro Zdero promueve la persecución judicial de opositores, lo que a nivel nacional se identifica con el nombre de “lawfare” –guerra judicial- y con el edificio de los tribunales federales de Comodoro Py, en el barrio porteño de Retiro.

Horas más tarde, el ministro y la secretaria general de la Gobernación, Carolina Meiriño, se fotografiaron con el exministro de Justicia durante el macrismo, Germán Garavano, uno de los integrantes de la “mesa judicial” investigada por perseguir dirigentes políticos, sindicales y sociales de la oposición durante el gobierno de Juntos por el Cambio.

Tanto Garavano, como Macri y el prófugo Fabián “Pepín” Rodríguez Simón fueron investigados por el caso de la “mesa judicial” pero la causa fue finalmente archivada por la jueza María Eugenia Capuchetti -designada por el propio Macri- quién también llevó adelante la cuestionada investigación por el intento de asesinato de Cristina Fernández de Kirchner. El sobreseimiento fue confirmado por la Cámara Federal que integran otros tres jueces nombrados por el macrismo: Leopoldo Bruglia, Pablo Bertuzzi y Mariano Llorens, también asiduo asistente a la Quinta de Olivos para jugar al fútbol con el expresidente Macri.

“El Estado se conforma por los tres poderes: Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Cada uno tiene independencia y autonomía para funcionar”, aseveró Gómez recordando la máxima de Montesquieu, y advirtió que “uno no puede actuar contra las instituciones cuando la Justicia saca una resolución que a uno no le gusta”, remarcó el ministro de Gobierno y sostuvo que la actitud de Capitanich “no habla de una persona democrática, sino más bien de una que todavía no puede digerir haber perdido las elecciones con el gobernador Zdero”.

Sobre el accionar de la fiscal Graciela Griffith Barreto en la causa que investiga presuntos hechos de corrupción en la que ordenó detener al expresidente del IAFEP, Mauro Andión, y su colaboradora María Laura Moreno, Gómez aseguró que “si hay alguien que no se le puede decir que pueda ser susceptible de alguna presión es a la doctora Griffith Barreto”.

Vale recordar que Griffith Barreto fue la fiscal que consiguió su ascenso a fiscal de Cámara luego de archivar la denuncia por corrupción contra la exintendenta radical Aída Ayala en la causa PIMP, hechos que luego fueron probados ante el Tribunal Oral Federal y que dieron origen a maniobras de lavado de dinero de esos fondos públicos obtenidos de forma ilícita.

“Lamento que una persona que fue y sigue siendo poderosa como el exgobernador Capitanich, que en algún momento fue nombrado para precandidato a presidente del partido a nivel nacional y que ahora es funcionario de la Provincia de Buenos Aires, lance este tipo de acusaciones con el objeto de que los funcionarios judiciales que puedan intervenir en las próximas instancias puedan tener algún tipo de cuidado. Estas expresiones no son propias de un demócrata como él dice ser”, afirmó Gómez.

El funcionario del Gobierno también le contestó a Capitanich por decir que Zdero era una persona “populista” y “autoritaria”. “Les parece que el Gobernador que sacó a los piqueteros de la calle ¿es populista? Les recuerdo que Resistencia era conocida como la capital nacional del piquete”, argumentó.

“También dijo que era autoritario. Nada está más alejado del gobernador Zdero que una persona con sesgos autoritarios; es alguien de buen trato, no solo con los chaqueños, sino también dentro del equipo de trabajo. Al Gobernador nunca lo vi despotricar contra la prensa ni tampoco lo vi romper un diario”, finalizó.


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