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A pesar de que todos los testigos coincidieron en que Roberto Espinoza era un periodista crítico, para el jefe de los fiscales, Jorge Canteros, de las declaraciones “no es posible inferir una conducta discriminatoria por parte de la demandada”. El dictamen no es vinculante para el Superior Tribunal de Justicia que tendrá la oportunidad de hacer justicia en este caso. De convalidarlo, sería un grave antecedente en contra de la libertad de expresión y la pluralidad de voces en el Chaco.

Jueves, 17 de octubre de 2024

Un precedente alarmante contra el derecho a la libertad de expresión y la pluralidad de voces podría generarse en el Chaco si el Superior Tribunal de Justicia convalida el dictamen del procurador general, Jorge Canteros, quién consideró que “no hubo una conducta discriminatoria” de la empresa ECOM Chaco SA al despedir al periodista Roberto Espinoza de los medios públicos, ni bien asumida la actual gestión del gobernador Leandro Zdero.

El jefe de los fiscales consideró que las declaraciones de los testigos -que fueron unánimes al describir a Espinoza como un “periodista crítico”- eran meras “opiniones” y no alcanzaban para probar que su despido se debió a una cuestión discriminatoria por su postura política.

Asimismo, dio por válidos los argumentos de la empresa de que el despido del periodista formó parte de una “reestructuración en la empresa” y de que también “sucedieron otras desvinculaciones”, basado en el testimonio de uno de los empleados de la empresa que declaró como testigo. Por lo tanto, dictaminó que debía rechazarse la acción de amparo impulsada por Espinoza para que se anule su despido y se lo reincorpore a su cargo.

La eyección de Espinoza de los medios públicos se dio en el marco del plan del gobierno de Zdero de sacar de la pantalla a todos los periodistas identificados históricamente con el canal Chaco TV, que en la nueva gestión cambió su nombre a Somos Uno.

La mayoría de trabajadores y trabajadoras “consintieron” su salida a cambio del pago de una indemnización y para evitar exponerse al desgaste de la persecución de la que fue víctima Espinoza. Ese plan de “renovación” es ejecutado por el secretario de Asuntos Estratégicos, Marcos Resico, a quién el gobernador Zdero encomendó la tarea de disciplinar a medios y periodistas mediante el manejo arbitrario de la millonaria pauta oficial.

Según se puede inferir, el procurador Canteros esperaba encontrar como prueba un documento en el cual las autoridades de la empresa dejaran escrito que despidieron a Espinoza por ser un periodista crítico o por estar identificado con la ex gestión peronista. Algo que nunca sucede.

Queda en manos del Superior Tribunal de Justicia resolver este caso en base a un análisis más profundo de la creciente avanzada gubernamental sobre la libertad de expresión y la pluralidad de voces en la provincia del Chaco. Como nota más reciente se inscribe la censura del canal Somos Uno contra el exgobernador Jorge Capitanich cuando brindaba una entrevista al periodista Julio Wajcman.

 


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