María Cantero, histórica secretaria del ex presidente, y Alicia Barrios, amiga de la ex primera dama, declararon ante la justicia. Ofrecieron detalles de la conflictiva relación, que incluía “maltrato emocional y psicológico”.
Viernes, 23 de agosto de 2024
Por Néstor Espósito
Ninguna de las dos testigos que declararon que inauguraron la ronda de declaraciones en la causa por la denuncia de Fabiola Yáñez contra Alberto Fernández acreditó que hubieran existido agresiones físicas. Tanto la ex secretaria privada de Fernández, María Cantero, cuanto la periodista Alicia Barrios, amiga personal de Yáñez, sostuvieron ante el fiscal Ramiro González que no tenían conocimiento de los golpes que denunció la ex primera dama. No obstante, describieron situaciones propias de un matrimonio desavenido y de una relación tensa, conflictiva, tóxica.
María Cantero, de cuyo teléfono surgieron los indicios sobre la supuesta violencia física de Fernández hacia su ex pareja, declaró que se sorprendió cuando recibió los chats y las fotografías sobre las supuestas agresiones. Reconoció que los chats efectivamente existieron, pero en ellos no consintió los golpes denunciados.
La ex secretaria –quien es investigada por presuntas irregularidades en la causa Seguros, que disparó el expediente por violencia de género- admitió que Fabiola Yáñez le envió varios mensajes contándole lo que, según su versión, estaba pasando.
Cantero contó que conoce a Alberto Fernández desde hace 35 años y certificó la existencia de una relación de “confianza y amistad”, pero afirmó que “Alberto no hablaba de su vida privada”. Esa relación no se repetía con Fabiola Yáñez. Ella se comunicaba por WhatsApp a su teléfono “de siempre”. Allí le mandó los chats que “salieron en todos los medios”, incluidas las fotos del ojo y los brazos amoratados. También allí Fabiola le informó que “recibía golpes periódicamente”. ¿La reacción de la ex secretaria? “Me sorprendieron muchísimo”.
Cantero también confirmó que una de las discusiones de la ex pareja presidencial tuvo como eje “los mensajes que le mandaba (Fernández) a una amiga”. Pese a que no la identificó claramente, dio indicios sobre que podría ser Sofía Pacchi, cercana a Yáñez una de las asistentes a la celebración de su cumpleaños en la Quinta de Olivos en plena pandemia. A propósito de esa fecha, recordó que trascendieron en la prensa “fueron justo un año después de la Fiesta de Olivos”, lo que le facilitó ubicarlos temporalmente.
Ayer también declaró como testigo la periodista Alicia Barrios, quien tampoco vio escenas de violencia física de Fernández hacia Yáñez, aunque sí dijo que Fabiola le hablaba de episodios de agresión psicológica.
Barrios conoció a Fabiola el 5 de marzo de 2021 cuando cubría como periodista las actividades del Papa Francisco y la ex primera dama presidía la fundación ALMA.
“El último contacto fue en Chapadmalal. Después este proyecto quedó en la nada. Evidentemente no era escuchada, que no había espacio para ella, con tanta mujer que había en el gobierno no entiendo porque la primera dama estaba en la oscuridad siendo tan inteligente. (…)Después de que tuvo el bebé esto se acrecentó, no se la veía más, no se sabía de ella. Su figura no era visibilizada. La invisibilidad de una primera dama hace al sometimiento”.
En ese contexto, definió el término “maltrato”. Recordó que en una oportunidad se reunieron en la Quinta de Olivos para planificar tareas de contenido social. “Trabajamos un día entero, después no avanzó ningún trabajo de lo que habíamos preparado. Eso es maltrato. El maltrato emocional y psicológico es tan grave como el maltrato físico, eso mata.”
El Fiscal le preguntó si sabía de la violencia física, psicológica o emocional y qué tipos de agresiones había recibido Barrios dijo que Fabiola no le manifestó nada de ello. “Pero yo lo percibí. Fabiola estaba agobiada”.
Barrios dijo desconocer un problema de adicción al alcohol que la propia Yáñez reconoció en el marco del expediente.- “No vi nada de alcohol”. En cambio sí confirmó, de manera genérica, otro tipo de problemas de la pareja: “En el medio todos sabíamos de la infidelidad de Alberto con Fabiola”.
Fuente: Tiempo Argentino