Joven contador de Resistencia, amante de los viajes por el mundo y prolífico creador de empresas denunciadas por inconsistencias en sus facturaciones. Así se podría definir a Walter Pasko, quien esta semana saltó a la fama tras ser sindicado por la Fiscalía Federal de Resistencia de ser el cerebro criminal detrás de una megausina de facturas apócrifas que posibilitó una evasión tributaria de al menos 155 millones de pesos. Su vínculo con el gobierno de Jorge Capitanich y un blanco que no cierra.
Sábado, 23 de diciembre de 2023
Por Bruno Martínez
Adrián A. es un carnicero de Resistencia que se dedica a su actividad de manera exclusiva desde hace más de tres años. Una mañana de junio de 2022 se sorprendió al recibir la incómoda visita de un grupo de inspectores de la AFIP quienes se acercaron para preguntarle por una serie de facturas a su nombre las cuales tenían inconsistencias.
El hombre las miró, revisó los días, los montos y no reconoció a ninguna de las empresas. En total, la facturación sospechada de irregular fue confeccionada entre mayo de 2019 y mayo de 2022, por un monto que superaba los 61 millones de pesos.
Sumada a esta irregularidad, también se le mencionó que luego de que se dio de alta en su actividad relacionada con la venta al por menor de carnes rojas, menudencias y chacinados frescos, alguien le fue añadiendo rubros para poder facturar en consecuencia.
Se le adicionó las actividades de “Reparación y mantenimiento de equipos informáticos”, con fecha de alta en diciembre de 2019; “Venta al por menor de materiales de construcción n.c.p.”, con fecha de alta en abril de 2020; “Venta al por mayor de alimentos balanceados para animales”, con fecha de alta en octubre de 2021; y “Venta al por mayor en comisión o consignación de cereales (incluye arroz), oleaginosas y forrajeras excepto semillas”, con fecha de alta en febrero de 2022. Todos rubros que el comerciante desconocía.
Los inspectores de la AFIP le indicaron que realice la denuncia penal porque evidentemente alguien utilizó su clave de CUIT para emitir facturas a su nombre y así generar crédito fiscal para pagar menos impuestos. O, en algunos casos, utilizar el documento para justificar gastos sin respaldo.
Al consultarle respecto de quien le llevaba la contabilidad, Adrián A. mencionó a su contador, Walter Pasko. Dijo que era quien emitía las facturas de su empresa y el único conocedor de su clave fiscal.
Algo casi calcado le ocurrió a Noemí F. El 8 de junio de 2022 dos personas de AFIP golpearon la puerta de su casa porque querían hablar sobre facturaciones realizadas a su nombre que presentaban irregularidades. En el período 2021, las facturaciones apócrifas que fueron emitidas desde su CUIT superaron los $37.000.000.
Ella negó haber confeccionado esas facturas porque de hecho no es comerciante y se había dado de baja del monotributo en 2013. Los inspectores le mostraron una serie de papeles en donde figuraba como inscripta en el organismo fiscal como responsable inscripta en IVA y en Ganancias, con fecha de alta de noviembre de 2020.
Tras quedarse junto a su esposo para revisar los papeles que le dejaron los funcionarios del fisco, se percató que el contador que figuraba era Walter Pasko. Pasko era un viejo conocido ya que fue quien le había dado el alta de una fundación llamada “Fundación Sonriendo con Jesús” de la cual ella y su esposo eran parte. El alta fue realizada en AFIP el 20 de noviembre de 2020, con fecha de contrato social el 9 de septiembre de 2019. La fundación tenía como fin ayudar a chicos con adicciones, pero les estaba faltando un lugar físico para funcionar. Por esta razón la misma no estaba funcionando.
Alfredo A., Susana V. y Gabriela S. les ocurrió exactamente lo mismo: facturas a su nombre que nunca habían confeccionado, empresas que no conocían, rubros que aparecían dados de alta en AFIP sobre actividades que no tenían idea, montos millonarios facturados (49 millones de pesos, 6 millones de pesos y 18 millones de pesos, respectivamente) y un contador en común: Walter Pasko.
A este grupo se le añadió un sexto damnificado: el periodista y locutor de Resistencia, Darío S. A él no lo visitaron los inspectores, sino que se dio cuenta de la irregularidad al constatar que su CUIT estaba bloqueado debido a que la AFIP señaló inconsistencias en sus facturaciones. El fisco le informó que entre 2021 y 2022 tenía facturas emitidas por 21 millones de pesos, sumado a múltiples tickets de compras factura “A” que eran apócrifos. La fiscalía Federal le consultó quien era su asesor contable. “Walter Pasko”, respondió.
Allanamientos
Una evasión fiscal de al menos 155 millones de pesos es lo que llevó a la Fiscalía Federal de Resistencia a ordenar el viernes por la mañana múltiples allanamientos en distintos puntos de la provincia. También se ordenó el secuestro de varios vehículos y el embargo de inmuebles.
Por esta causa, hay seis personas en la mira de la Justicia, acusadas de conformar una asociación ilícita dedicada a la emisión de facturas apócrifas, tanto para bajar el monto de impuestos a pagar como para justificar gastos en organismos públicos. Se sospecha que su organización criminal está activa desde hace una década.
En su requerimiento de instrucción judicial, el fiscal, Patricio Sabadini, estableció que los imputados habrían conformado una organización ilícita con la finalidad de generar crédito fiscal espurio, evidenciándose una estructura de personas físicas y jurídicas utilizadas como usinas de facturas apócrifas para disminuir el monto de impuestos a ingresar al fisco nacional por parte de terceros contribuyentes e integrantes de la misma organización, ello entre otras maniobras ilícitas de carácter tributario. Además, mediante la falaz declaración de bienes, se habría realizado una fenomenal evasión del Impuesto a las Ganancias.
Walter Pasko está sindicado como presunto líder de esta organización criminal. También están imputadas su pareja, Diana Daniel, abogada y empleada del gobierno del Chaco en el área del Instituto de Agricultura Familiar. La suegra de Pasko, Juana Brahim y sus hermanos, Álvaro y Carlos Pasko. A estos se les suma, Fernando Ayala, secretario del dirigente piquetero, Raúl “Tito” López y la esposa de Ayala, María José Reineau.
Sabadini solicitó a la jueza Federal, Zunilda Niremperger, que los cite para que presten declaración en calidad de imputados por los presuntos delitos de asociación ilícita fiscal y lavado de activos, con penas que van de los 3 a los 10 años de prisión y multas que llegan a 10 veces el monto de la operación observada.
En este sentido, para entender la gravedad del caso, la Administración Federal de Ingresos Públicos estimó en poco más de $51 millones para el IVA y $103 millones para Impuesto a las Ganancias el perjuicio fiscal provocado, tomando sólo como referencia tres de las personas jurídicas utilizadas para emitir facturación apócrifa: La Reina del Norte SAS, Cooperativa de Trabajo Construir Mas LTDA y Tercer Norte SRL.
Agentes de la división Delitos Económicos de la Policía del Chaco y de Gendarmería Nacional tuvieron a su cargo los allanamientos que se realizaron en nueve locaciones. A saber:
-Avenida Las Heras 376, piso 1°, de Resistencia, lugar donde funciona el Estudio contable de Walter Pasko.
-Güemes 1424, de Resistencia. Este es el domicilio fiscal de Diana Yael Daniel, pareja de Pasko, y donde funciona su estudio jurídico. También es el domicilio legal de Walter Pasko y de diversas personas jurídicas relacionadas a la organización investigada.
-Una casa del barrio 20 Viviendas, de Fontana. Este es el domicilio fiscal de Fernando Adrián Ayala, de su pareja, Maria José Reinau, y de varias personas jurídicas relacionadas, como Feraya SAS, Fundación Brilla Mujer, Fundación Solidaridad Es Una Elección de Vida, entre otras.
-Un inmueble ubicado en avenida Sarmiento 185, en pleno centro de Resistencia. Este lugar es el domicilio real de residencia de Ayala y Reinau, el cual habría sido comprado a la actriz, Miriam Lazonni, por un monto estimado en 180 mil dólares.
-Un inmueble ubicado en Liniers 225, de Resistencia. Este es el domicilio fiscal de la Cooperativa de Trabajo la Solidaridad Es Mi Mundo, de la cual Ayala sería presidente y donde funciona el salón de belleza Brilla, propiedad de su esposa, Maria Jose Reinau.
-Inmueble y anexos sito en avenida Sarmiento 239, de Resistencia, donde funciona otra sucursal del salón de belleza “Brilla”.
-Una casa ubicada en Marcelo T. de Alvear 475, en Villa Angela. Este es el domicilio fiscal de Tercer Norte S.R.L., Brasco Salud S.A.S (empresas vinculadas con los imputados) y de Carlos Nicolás Pasko. También es domicilio alternativo de Álvaro Pasko, de Walter Pasko y de Jorge Pasko.
-Inmueble y anexos en el barrio Loma Linda, de Sáenz Peña. Este es el domicilio declarado como legal de Diana Yael Daniel.
-Un inmueble del barrio Fonavi, en Los Frentones. Este es el domicilio fiscal de Juana Brahim (suegra de Walter Pasko) y también de la empresas Reina del Norte S.A.S.
El origen
Esta causa se inició el 24 de noviembre de 2023, con una denuncia de la AFIP. De acuerdo a la imputación de la Justicia, el contador Pasko se aprovechó de la confianza de sus clientes e hizo uso fraudulento de sus claves fiscales, para emitir facturas truchas en perjuicio de ellos y en favor de las personas jurídicas que administraba como usinas de facturación para compensar el débito fiscal. En otras palabras: otorgaba facturas de supuestos servicios realizados por su clientes a empresas que se beneficiaban al sumar IVA crédito y así poder pagar menos impuestos.
En simultáneo, para que la posición mensual de IVA no se desmadre, y mantener el ardid bajo control, la maniobra utilizada era inventar tiquet factura “A” en los libros IVA Compras de sus clientes estafados, como también en algunos casos recibía facturas “reales” pero de operaciones inexistentes.
Además de usufructuar CUITs, Pasko montó una red de empresas y cooperativas que casi no tenían actividad pero que emitían una gran cantidad de facturas. En algunas, aparecía como cotitular y en otras como asesor contable. Pero la modalidad en cuanto a la facturación apuntaba a los mismos y opacos fines. La Reina del Norte SAS, Cooperativa de Trabajo Construir Más Ltda. y Tercer Norte SRL, son algunas.
La Fiscalía Federal constató también que varias facturas apócrifas estaban a nombre de varios organismos del gobierno del Chaco, durante la gestión de Jorge Capitanich. Entre los que se cuentan el Ministerio de Infraestructura; el de Gobierno; el Instituto de Agricultura Familiar y Economía Popular (IAFEP), el del Instituto de Desarrollo Urbano y Vivienda y el Ministerio de Ambiente.
A esta lista se le suman una gran cantidad de municipios como lo son: Gancedo, Napenay, Pinedo, Corzuela y Capdevilla. Vale mencionar que la adquisición de facturas apócrifas es un ardid que se utiliza para validar gastos estatales que de otro modo no se podrían justificar. Dicho en términos contables: conciliar la caja con las reales salidas de fondos.
Cabe mencionar que la pareja de Pasko es empleada del IAFEP. Y fue ella misma, quien en su momento le habría indicado a una de las víctimas, un hombre que tenía una cooperativa de trabajo y que solamente buscaba apoyo del Estado para construir dos casas, que concurriera hasta el estudio de su pareja para que lo asesore.
Justamente, esta semana, el gobierno provincial tomó la decisión de intervenir el IAFEP y realizar las auditorías correspondientes tras recibir múltiples denuncias por irregularidades en el funcionamiento del organismo durante la gestión anterior.
Construir Más
Un caso paradigmático de cómo emitía facturas Pasko y su organización es lo que hacía a través de su Cooperativa de Trabajo “Construir Más” Limitada. Con domicilio fiscal, real y legal en Güemes 1424, en Resistencia, la cooperativa está constituida por Alvaro Ivan Pasko (asociado secretario), Walter Antonio Pasko (asociado y Presidente), Diana Yael Daniel (asociada y sindica suplente), Carlos Nicolas Pasko, Valeria Soledad Dosso y Melina Pacheco.
Según la investigación, la cooperativa tiene ingresos declarados por $0 (cero pesos), conforme a su declaración jurada de IVA, en el período 2022. Posee como fecha de contrato social el 13 de septiembre de 2022 y fecha de inscripción en AFIP en noviembre 2022.
Las actividades declaradas son: Construcción, reforma y reparación de edificios no residenciales (Fecha de alta octubre de 2022); Venta al por menor de pan y productos de panadería (Fecha de alta abril de 2023 y de baja agosto de 2023); fabricación en industrias básicas de productos de hierro y acero (fecha de alta agosto de 2023) y Venta al por menor de materiales de construcción (fecha de alta octubre de 2023).
No declaró bienes muebles e inmuebles, ni tampoco empleados en relación de dependencia. Presentó el libro IVA Compras e IVA Ventas únicamente del período de noviembre de 2022 a enero de 2023 en cero peso.
Tiene una única factura electrónica recibida, fechada el 13 de junio de 2023, a nombre de una maderera por un valor de 13.200 pesos. En contraposición, tiene registradas facturas emitidas en el período de febrero de 2023 a octubre de 2023, por poco más de 11 millones de pesos. ¿A quién le facturó? Al IAFEP, a un Fideicomiso del gobierno provincial, al Poder Judicial del Chaco, a una asociación Civil y a la municipalidad de Napenay.
Solamente si se toma en cuenta sus facturas, tanto emitidas como recibidas, para la fiscalía Federal está claro que dicha cooperativa tiene como único fin la de emitir facturas apócrifas. Es llamativo, en este punto, que la firma no registre facturas de compras siendo sus actividades declaradas la de “construcción/reparación, ventas y producción” por lo que indefectiblemente necesitaría adquirir herramientas como así también materiales para la actividad de construcción/reformas, mercaderías para la venta de materiales de construcción o la materia prima para la producción de hierro y acero.
También se puntualizó sobre el hecho de que no registra bienes muebles e inmuebles a su nombre, y que el domicilio es la casa habitación donde residen sus socios, no contando con local comercial y/o depósito para el desarrollo de las actividades en las cuales se encuentra inscripta, como ser “fabricación en industrias básicas de productos de hierro y acero” y “Venta al por menor de materiales de construcción”.
Tampoco registra empleados en relación de dependencia, lo cual resultaría necesario en el caso que desarrolle la actividad de Construcción, reforma y reparación de edificios no residenciales. Adicionando a esto que las acreditaciones bancarias resultan ser bastantes inferiores a los importes facturados.
Viajes
Si uno recorre las redes sociales de Pasko, interpreta que es un joven profesional que le va muy bien. Sus viajes por el mundo así lo demuestran. Sin embargo, si uno tomara solamente sus declaraciones patrimoniales, pareciera ser que se trata de tan solo un contador con ingresos muy modestos.
A pesar de que ninguno aparece en sus declaraciones juradas (DDJJ) de Ganancias ante la Afip, la fiscalía confirmó que Pasko tiene cuatro inmuebles, adquiridos entre 2019 y 2022. También cuenta con tres camionetas marca Toyota y una motocicleta Honda Biz.
De acuerdo a las DDJJ de Ganancias, declaró ingresos que no están acordes a los bienes que posee. En 2018, declaró $179.285; en 2019, $1.001.350; en 2020, $55.000 y en 2021, $1.110.000. Esto difiere a su vez con lo expuesto en el Régimen Informativo de Compras y Ventas de la Afip, donde se presenta aún como más pobre: en el 2018 figuran ventas totales por $17.660; en 2019 y 2020 sin ventas y en 2021, $348.866.
No sólo estos ingresos son inconsistentes con su patrimonio, sino también con los gastos que realizó tanto dentro como fuera del país en sus reiterados viajes. Entre febrero de 2018 y junio de 2022, se le detectaron gastos con tarjetas de crédito en el exterior en EEUU, Paraguay, Brasil, Polonia, España, Rusia, Italia, México y Francia. Un viajero empedernido.
“En las declaraciones juradas de ganancias períodos 2018 a 2021 (que fueron las aportadas por AFIP), las mismas cuentan con grandes incongruencias contables y financieras entre sí, teniendo en cuenta los ingresos, gastos, patrimonio al inicio, cierre y en consecuencia el consumido”, señaló la fiscalía, confirmando así el ardid del contador para omitir el pago del tributo, al ocultar su real situación patrimonial.
Otro dato importante para entender el perfil de Pasko es su desfachatez. Es que cuando sus actuales y exclientes procedieron a cambiar sus claves fiscales, el contador inmediatamente se dio de alta en una serie de actividades ante la AFIP con la intención de presuntamente seguir emitiendo las facturas truchas, para que la usina no se frene.
De acuerdo al detalle, hasta octubre de 2022, sólo tenía como actividad la de “servicios de contabilidad, auditoría y asesoría fiscal”, propio de su labor como contador. Sin embargo, a partir de octubre de 2022, luego de las denuncias por el uso indebido de los CUIT, añadió también los de “servicio de transporte automotor de carga”, “servicios relacionados con la construcción”, “venta al por menor de materiales de la construcción” y “servicios de asesoramiento, dirección y gestión empresarial”.
Vínculos
Una cuestión a mencionar es el vínculo de Pasko con el secretario de Tito López, Fernando Adrián Ayala. Pasko y Ayala comparten la propiedad de la firma “Ricardo Hijos SRL”, también observada por la AFIP por inconsistencias.
Además de que el primero es contador de la cooperativa del segundo, la cual lleva el nombre “Cooperativa de Trabajo Colonias Unidas LTD” y cuya presidenta es María Reinau, esposa de Ayala. Dicha organización se encuentra inscripta para servicios de construcción, reforma y reparación de edificios residenciales; venta al por menor de materiales de construcción n.c.p.; servicios de transporte automotor de cargas n.c.p; venta al por mayor de abonos, fertilizantes y plaguicidas; movimiento de suelos y preparación de terrenos para obras y venta al por mayor de alimentos balanceados para animales.
El importe total de facturación emitida por la misma en el período 2019 a 2022 fue de $95 millones, siendo el neto de $74.181.965 e IVA de $14.906.691,64. Esta cooperativa, según indicó el Ministerio Público fiscal, fue incluida por la AFIP-DGI dentro de la base de contribuyentes no confiables en condición de “usinas apócrifa sin capacidad operativa, económica y/o financiera”.
A su vez, Reinau y Ayala comparten cuentas bancarias de muchas asociaciones y cooperativas, entre las que se cuentan: Asociación Civil Jóvenes Solidarios en Movimiento; Cooperativa de Trabajo Siempre Brillando Limitada; Cooperativa de Trabajo Unidas Cambia III LTDA; Cooperativa de Trabajo La Solidaridad es Mi Mundo Limitada y Fundación Brilla Mujer.
Un dato anecdótico pero que también forma parte de la causa es la compra de un inmueble que realizaron Ayala y Reinau a la famosa actriz, Miriam Lanzoni. La expareja del periodista Alejandro Fantino, le habría vendido un departamento ubicado en pleno centro de Resistencia por un monto de 180 mil dólares. Algo que, para la Justicia, no cierra por ningún lado.
Apócrifas
En su charla “Facturación apócrifa. Lineamientos de jurisprudencia y algunos mecanismos de prevención”, realizada en febrero de 2020, en el marco de actividades realizadas por el Centro de Estudios en Administración Tributaria del facultad de Ciencias Económicas de la UBA, el contador, Pablo Porporatto, detalló a qué apunta este tipo de actividades ilícitas y las implicancias de la misma.
Explicó en primer término que la emisión y utilización de facturación apócrifa es un fenómeno grave y complejo que, entre otras cuestiones, propicia una competencia desleal o injusta en los negocios, entre aquellas empresas que hacen uso de las mismas respecto de las que no. Y es funcional, no sólo para el delito de evasión de impuestos, sino también para el lavado de activos ilegales, la financiación del terrorismo y la corrupción.
Una factura apócrifa involucra una documentación comercial que, pudiendo cumplir recaudos formales, no se condice con la realidad de los hechos y o sujetos intervinientes en una operación que se intenta respaldar.
La intención es la simulación de un hecho económico con transcendencia tributaria, que puede involucrar una falsedad ideológica (el comprobante instrumentalmente es válido, pero trasmite una verdad adulterada) o una falsedad material del comprobante (no existe como tal).
Desde AFIP se actúa principalmente con posterioridad, aunque en los últimos años se han introducido diversas medidas previas o preventivas. Aproximadamente, dos tercios de las denuncias penales tributarias que formula AFIP son por causas de estas facturas.