Se trata del exmayor del Ejército, Gustavo Athos Renes, quién ya había sido beneficiado por el Tribunal Oral Federal de Resistencia. Tras la apelación de los fiscales federales de Resistencia, en voto dividido la Sala II de la Cámara Federal de Casación Penal confirmó esa resolución. Las salidas serán al domicilio de su hija, apologista de la dictadura.
Sábado, 31 de diciembre de 2022
Con los votos de los jueces Angela Ledesma y Guillermo Yacobucci y la disidencia de Carlos Mahiques, la Sala II de la Cámara Federal de Casación Penal rechazó un recurso de apelación de los fiscales federales de Resistencia y confirmó las salidas transitorias para el represor Gustavo Athos Renés, quién hoy se encuentra detenido en el Complejo Penitenciario Federal II, de Marcos Paz.
Renés fue condenado a prisión perpetua en mayo de 2011 como coautor responsable de 11 homicidios doblemente agravados (por alevosía y por el número de partícipes) y privación ilegal de la libertad doblemente agravada por mediar violencia en la causa por la masacre de Margarita Belén.
La resolución fue dictada el 28 de diciembre último por la Sala II de Casación.
En sus fundamentos, la jueza Ledesma consideró que “la falta de incorporación del interno al período de prueba no puede ser considerado un obstáculo válido para rechazar el instituto bajo estudio”. En ese sentido, coincidió con el juez de Ejecución quién había atribuido responsabilidad al Servicio Penitenciario Federal por la demora en incorporar al condenado al período de prueba.
El juez Yacobucci coincidió con su colega y además destacó que “todas las áreas que se expidieron reflejan de forma positiva el desarrollo intramuros del condenado”.
En disidencia, el presidente de la Sala II, Carlos Mahiques, consideró que “al no configurarse los requisitos previstos en la Ley de Ejecución Penal y el decreto reglamentario 396/99, entiendo que corresponde hacer lugar al recurso de casación interpuesto por el Ministerio Público Fiscal, anular la resolución recurrida y reenviar las actuaciones para un nuevo pronunciamiento, sin costas (arts. 456, 470, 530 y cc. del CPPN)”.
¿En buenas manos?
Para concretar sus salidas transitorias, Renés fijó un domicilio particular, el de su hija María Laura Renés, en el barrio porteño de Belgrano. Según consigna una nota de Letra P, firmada por el periodista Diego Genoud, María Laura considera a su padre como un “preso político” y aboga por la amnistía de los genocidas, en una línea cercana a la apologista de la dictadura Cecilia Pando.
“Antes de hablar mentiras de los 70’, hablen de las torturas que pasan nuestros presos políticos. A la terrorista de Bonafini ni siquiera la presentan a la justicia por su edad, militares de más edad que ella están en una cárcel común, enfermos, privados de todo. Ellos lucharon contra unas mierdas que hoy de traje hablan de Derechos Humanos cuando fabricaban bombas molotov para hacer daño. Secuestraban, mataban, pero hoy en día son ‘señores profesionales’, claro, del terrorismo”, posteaba en su cuenta de Facebook en el año 2015. Ni un atisbo de reconocimiento de la gravedad de los crímenes contra la humanidad que cometió su padre, por los que fue juzgado y condenado.
Por su parte, el yerno de Renés, Claudio Pasqualini, fue nombrado al frente del Ejército durante la gestión del expresidente Mauricio Macri.